“Descubra a los leones trepadores de árboles en Uganda. Esta manada es uno de los dos únicos grupos de leones raros que escalan árboles a diario.
Estos leones optan por subir a los árboles para escapar del calor y los insectos. La población reside en el Parque Nacional Queen Elizabeth, en el área de Ishasha en Uganda, y constituye una popular atracción turística.”
“Desafortunadamente, la manada ahora se ve forzada a abandonar su rango normal para cazar presas. Estudios recientes indican que la caza furtiva ha reducido la cantidad de presas generalmente disponibles en su área de distribución, obligando a los leones a desplazarse más lejos en busca de alimento.
La caza furtiva en el parque ha disminuido el peso total de los animales de presa de los leones, como los antílopes, de 50,700 libras por 0.6 millas cuadradas en la década de 1970 a solo 17,750 libras por 0.6 millas cuadradas en la actualidad, según informa Live Science.
Los leones de Ishasha prefieren alimentarse del kob de Uganda, un tipo de antílope endémico del África subsahariana. La baja densidad de presas en sus hábitats boscosos nativos se atribuye a una disminución en el tamaño de la manada.
Los datos recopilados de leones equipados con collares de radio entre 2005 y 2010 permitieron a los investigadores calcular el tamaño promedio del rango entre 13 y 15 millas cuadradas, lo cual es extremadamente pequeño para los leones en comparación con sus parientes del Serengeti.
Una disminución en la densidad de presas, tamaños de manada más pequeños y territorios de distribución normales pequeños son indicadores de la necesidad de un mayor esfuerzo de conservación para proteger a estos venerados animales.
“Los leones trepadores de árboles de Ishasha son una importante atracción ecoturística para el país, pero estos grandes felinos están comenzando a disminuir en número”, declaró Simon Nampindo, director del programa de Uganda de WCS, a Phys.org. “Una forma de asegurar un futuro para los leones en Uganda sería invertir en aumentar la densidad de presas en el Parque Nacional Queen Elizabeth y, al mismo tiempo, proteger los importantes pastizales y el hábitat de bosques abiertos de los cuales dependen los leones”.”
Recientemente, un periodista de National Geographic siguió a los leones durante una misión de seis meses.
La historia tuvo un final triste, como se cuenta en el siguiente vídeo: